Orizaba, Ver. – Las repercusiones de la contingencia de salud por el Covid-19 no sólo son económicas, también son sociales; durante el confinamiento los índices de violencia hacia la mujer y la violencia intrafamiliar han aumentado de manera considerable, hasta un 60 por ciento.
«Debido al confinamiento las mujeres han enfrentado una mayor violencia hacia ellas, sus hijos e hijas, de acuerdo con las cifras de la ONU, la violencia hacia las mujeres ha aumentado hasta en un 60 por ciento, un promedio de 155 mujeres violentadas cada hora buscan ayuda», mencionaron representantes del colectivo feminista Marea Verde Altas Montañas.
Aunado a al incremento en los casos de violencia de género e intrafamiliar, existe el retardo en los trámites para interponer una denuncia por violencia, debido a que en las fiscalías labora un menor número de trabajadores por la pandemia, llegando a existir un tiempo de espera de hasta 5 horas para atender una denuncia.
Sin embargo, las féminas también se han visto afectadas durante la contingencia de salud por el tema económico, sobre todo las madres solteras, y quienes se han privado de su trabajo por la pandemia.
«Desde el 17 de marzo del presente año se decretó en el país y en el estado la contingencia de salud por el Covid-19 y se llamó a la población a quedarse en casa hasta la conclusión de dicha emergencia sanitaria, esto sin embargo ha traído como consecuencia un grave impacto en lo económico, en los hogares de jefas de familia que en el mejor de los casos han visto reducidos sus ingresos económicos, y en el peor se han quedado sin sus fuentes de empleo», sentenciaron.
