Por: Jacinto Romero Flores
Ixtaczoquitlán, Veracruz. – Tras dar a conocer ser muy pocas las personas dedicadas a la apicultura en la zona centro, debido a que se debe tener una vocación, pero además de que las abejas los acepten como sus dueños, el apicultor Sergio González Antonio, expresó su alegría porque dijo está trabajando para el bien de la humanidad.
Explicó que uno de los conocimientos adquiridos en el catorceavo congreso internacional de capacitación apícola, ahí se les informo la importancia de la polinización en la que trabajan las abejas.
Comentó: la polinización es un proceso fundamental para la supervivencia de los ecosistemas, esencial para la producción y reproducción de muchos cultivos y plantas silvestres.
Ejemplificó: las plantas hacen su sexualidad a través de la polinización, el polen va a caer en el pistilo quien hace la función del ovario para luego transformarlo en fruto o en semilla.
Indicó que las abejas deben de ser llevadas a otros lugares en donde se tenga floración, una vez terminándose aquí en Ixtaczoquitlán, se llevan al altiplano o al sur dependiendo donde haya, en Tierra Blanca a la cosecha del mangle, o a la flor de campanita, en altiplano por la floración del acahual, el mozo quelite, polinizan el maíz el haba el chícharo, en si es una enorme tarea, pero si te gusta, lo disfrutas.
Otra de las funciones del cuidado de las abejas, es que se da el efecto de que las plantas puedan generar el oxígeno suficiente para la vida y aumentar el rendimiento en los cultivos, lo que favorece un incremento en alimentos de origen vegetal, e insumos agropecuarios.
Aseguró que no todos los enjambres son malos, incluso al ser el único apicultor reconocido a nivel nacional, trabaja con los departamentos de Protección Civil de los diferentes municipios de la zona centro, el cual se encarga de ir a recoger los enjambres para meterlos a la colmena.
Para finalizar el entrevistado, dijo que, de manera paralela, al ser productor de miel, igual la ofrece al público, llamando a su teléfono 272 72 4 90 10 en Ixtaczoquitlán.
