*Al lado de su esposa Guille y su hijo Beto
*Todo un ejemplo a seguir
*Le llueven felicitaciones
Por Noé Flores Cortés
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Roberto Luévano Vega, “Motita”, brilló con luz propia en la carrera 200 años de la Armada de México celebrada en Anton Lizardo, donde participó en los 5 kilómetros, con un buen tiempo y lo hizo al lado de su esposa Guille y su hijo el ingeniero industrial Betito.
Roberto siempre ha sido un excelente deportista, entrenador y formador de triunfadores dentro de una cancha, algunas de sus muchas cartas de presentación, es la formación de Miguel Layún y José Javier Abella dos jugadores de futbol destacados en la primera división.
Como entrenador llevó a la final de la tercera división al Santos Casino; antes había sido auxiliar técnico de Enrique Rivas en el Marina de la segunda división y de Azucareros de Córdoba con Joaquín Espinoza.
Entrenador en jefe de la Escuela de Futbol del Casino Español, director técnico de varios equipos infantiles y juveniles, siempre poniendo el ejemplo, dentro y fuera de la cancha.
El grupo de los Luevano Boys es cosa aparte, lleva 27 años y más entrenando a temprana hora a gente que gusta del futbol, sin importar su edad; ha sabido no solo entender que la mayoría busca mantenerse en buena forma, prepararse para jugar el sábado o el domingo, pero sobre todo, pasarla bien.
Nunca ha dejado de entrenar, de hacer ejercicio, de poner el ejemplo, pero sobre todo, es un hombre honesto, siempre dispuesto a tender la mano amiga, además de ser un excelente motivador para que mediante el ejercicio y el futbol se busque un mejor nivel de vida sana.
Este domingo, Roberto Luévano Vega, “Motita” para los que le quieren y le tienen presente, como futbolista, como entrenador, como formador y sobre todo como amigo, participó en la carrera 200 años de la Armada de México en Boca del Río, por lo que la Heroica Escuela Naval Militar, el certificado de resultados luego de haber recorrido los 5 kilómetros de la competencia.
Sus alumnos, amigos y familiares le felicitaron a Roberto, a la congratulación que nos unimos y la hacemos extensiva, pues también participaron en dicha competencia, su esposa Guille y su hijo el ingeniero industrial Beto. Felicidades.
