Benito Juárez Ramírez
Córdoba, Ver.- Un jóven con enfermedad de parkinson, fue «torturado» por elementos de la Policía Estatal delegación XXI de Córdoba, quien estuvo a punto de ser asesinado; pero gracias a que la madre llegó, evitó que su hijo fuera víctima de estos policías.
Los genizaros irrumpieron con violencia en el interior de su domicilio donde causaron destrozos por segunda ocasión, teniendo que acudir ante la Unidad Integral de Procuración de Justicia para denunciar los hechos, además de pedir la intervención de la Comisión de Derechos Humanos, así como asuntos internos de la Secretaría de Seguridad Pública.
Los hechos ocurrieron aproximadamente a las 12:00 horas es este miércoles, luego de que varios elementos estatales que realizaban operativos en la zona del Cerro de Colorines, de esta ciudad de Cordoba, llegaron hasta la manzana 39, lote 60 de la colonia que lleva el mismo nombre, y sin orden de cateo emitida por un juez, ingresaron a una vivienda en la cual se encontraba el joven Jaime Othon Martínez, de 35 años quién se dedicaba a la albañilería, pero tras sufrir parkinson, solo ayuda a su mamá en las labores de la casa.
Una vez que los Policías cubiertos del rostro ingresaron a la casa, comenzaron a causar destrozos además de que al joven enfermo lo comenzaron a golpear de manera brutal hasta «reventarle» los labios de la boca, lo patearon en repetidas ocasiones y no conformes, lo comenzaron a «torturar» al asfixiarlo con una bolsa de plástico.
De no haber llegado de manera inmediata la mandre del jóven, la cual fue alertada por los vecinos sobre lo sucedido, la persona hubiera sido asesinada.
Los policías al ser encarados por la mujer sobre las agresiones a su hijo, la amenazaron con hacerle daño si esta daba a conocer los hechos ante los medios de comunicación, o incluso con las autoridades de la Fiscalía.
Cabe mencionar que de acuerdo a los datos de las partes afectadas, indican que es la cuarta vez que los policías irrumpen en su domicilio, ya que la última vez fue hace 8 días cuando se metieron a su casa y volvieron hacer destrozos.
Ante estos hechos, tuvieron que acudir ante la Fiscalía Regional para presentar la denuncia correspondiente por los hechos ya que temen regresen nuevamente y logren su cometido.
Vecinos del lugar, pidieron la intervención del gobernador Cuitlahuac Garcia como del secretario de Seguridad Pública, toda vez que estos policías están violentando los derechos humanos.
