Por: Noé Flores Cortés
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*Algo para recordar; Tomás Morales
*Los inicios de la pelota mexicana
*Dónde se jugó el primer juego en México
*Guaymas, Nuevo Laredo, Cadereyta o Yucatán
Aprovechando la cuarentena y la nula actividad deportiva, nos echamos un “clavado” a los libros, para recordar uno de los deportes que más nos apasiona, el beisbol; para lo cual, recurrimos a la enciclopedia de la Liga Mexicana, donde nos dice que Baldomero Almada es el primer mexicano que llegó a Grandes Ligas y abrió las puertas para muchos mexicanos, sin embargo, Betín Santana nos comenta que estamos equivocados, que no fue él, quien primero pisó la gran carpa y lo aceptamos, pues Beto es un experto en pelota, así que esperamos su informe y comparamos.
Seguiremos hablando de los peloteros mexicanos en Grandes Ligas; en lo amateur pues tendremos comentarios de los peloteros de los Astros o Millonarios de La Dina; de la Sección 25 de Tierra Blanca y de quienes ustedes nos hagan llegar, pues la idea es abarcar todo lo que se refiere al Rey de los Deportes.
Aquí abordaremos El Béisbol Mexicano a través de las Décadas, escrito por Tomás Morales a quien tuvo el gusto de conocer y saludar allá en las instalaciones de la Liga Mexicana alguna ocasión; en el salón de la fama en Monterrey alguna vez, donde también estuvieron presentes Jorge de la Serna, Raúl Mendoza, Enrique Kerlegand, Demetrio Hernández, alguien de apellido o sobrenombre Baldwin, entre otros muchos más, que poco a poco iré recordando.
Guaymas, Nuevo Laredo y Cadereyta
Tomás Morales dice que a ciencia cierta es imposible asegurar en dónde realmente se jugó el primer partido de béisbol en México, varias ciudades reclaman ese honor, y a pesar de los titánicos esfuerzos para descubrir el lugar exacto, todavía ni los mismos historiadores se han puesto de acuerdo.
Existen tres ciudades que se pelean ese título, Guaymas, Sonora; Nuevo Laredo, Tamaulipas y Cadereyta, Nuevo León.
Guaymas asegura que fue en 1877, cuando los marineros que formaban la tripulación del barco americano Montana de visita en ese lugar, bajaron a la tierra mexicana y jugaron un partido de béisbol entre sí. Otros buques como el Newborne hicieron lo mismo y en poco tiempo se formó el equipo de béisbol de esa ciudad.
En Nuevo Laredo, frontera con Estados Unidos, hacia el Estado de Texas, se construía el ferrocarril del Estado de Tamaulipas y se contrató a supervisores americanos, uno de ellos Johnny Tayson, que era entusiasta del nuevo deporte y comenzó a enseñarlo entre los trabajadores.
Así formó dos equipos de béisbol que jugaron entre sí, para uno de los primeros pasos del gran deporte en México. Gente de aquel tiempo aseguraron que también fue en 1877 cuando se jugó ese primer partido.
Yucatán es otro de los escenarios que conoció pronto el gran pasatiempo y se debió a su proximidad con Cuba. Se da como seguro que en 1980 arribó a las playas yucatecas la corbeta española Ciudad Condal, en la que viajaba la familia de Fernando Urzaiz. Entre los juguetes de los niños había un bate y una pelota de béisbol, deporte que ya se practicaba en Cuba, por lo que esos niños jugaban a la pelota; pronto el béisbol fue el deporte principal de Yucatán.
Nuevo León también reclamó por mucho tiempo y lo sigue haciendo, de haber sido el primer lugar donde se jugó béisbol en México, y dan como fecha el 4 de julio de 1889. En esa época se tendía la vía férrea Monterrey-Tampico y los trabajos se efectuaron bajo la responsabilidad del coronel Treadwell Ayres Robertson y como era 4 de julio, les dieron el día libre a los trabajadores y éstos empezaron a jugar béisbol, precisamente en la estación San Juan, de Cadereyta, Nuevo León.
Por lo que respecta a la Ciudad de México, la fecha que se conoce data de 1887, con el nacimiento del México Club, el que es sin duda el equipo más antiguo del país y hasta ahora el México ha tomado parte de la Liga Mexicana.
Con la llegada del siglo XX el béisbol se convirtió en uno de los deportes favoritos de todo México; por la península de Yucatán llegaron varios equipos de Cuba que iban de gira y varios peloteros se quedaron a vivir en México; por el lado de la frontera las novenas mexicanas tenían oportunidad de jugar contra equipos estadounidenses y a la Ciudad de México llegaban clubes de todos lados, atraídos por la fama de la gran capital.
El origen del béisbol mexicano, no se sabe exactamente dónde fue, pero hoy se disfruta en todos los rincones del país y despierta una gran pasión, por eso es el Rey de los Deportes…
