Por: Noé Flores Cortés
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*5-2 con bronca
*Serie “caliente”, no perdonan a Houston
*Se vaciaron las bancas de los equipos
La situación de la pandemia, la temporada recortada a 60 juegos, el jugar sin aficionados en la tribuna y el número creciendo de positivos de coronavirus en la primera serie del béisbol de las Grandes Ligas, le quitaron el reflector al asunto de los Astros de Houston acusados y señalados por muchos como tramposos, por haberse “robado” las señales; se esperaba una temporada difícil para ellos y ya empezó.
Este martes en su casa, enfrentaron a los Dodgers, los cuales ganaron el juego a los Astros al son de 5 carreras a 2, en lo que marcó el primer enfrentamiento entre ambas novenas desde que se reveló que los Astros habían robado señales durante la temporada 2017, en la que derrotaron al equipo de Los Ángeles en la Serie Mundial.
La afrenta no se olvida y el relevista de Los Ángeles, Joe Kelly, hizo lanzamientos altos y pegados a Alex Bregman y al boricua Carlos Correa en la sexta entrada, lo cual provocó fricción, se vaciaron las bancas y aquello estuvo a punto de convertirse en una trifulca, que por fortuna no pasó a mayores, pero esto es apenas el principio.
Mucha gente vaticinó que en esta temporada, le iba a “arrimar” la bola a los peloteros de los Astros, lo cual sucedió en los pocos juegos de pretemporada, donde hubo varios bateadores golpeados y ahora, en el mismo estadio de Houston ante Dodgers, ya se dio el primer conato de bronca.
Dodgers hizo 5 carreras en el quinto episodio, Kelly quien estuvo con Boston en 2017 y enfrentó a Houston en esa postemporada, le lanzó a la espalda a Bregman, que caminó gratis a primera, no sin antes hacer una mueca tras saltar, para que la bola no le pegara; tronó hacia la primera base.
Con dos fuera Kelly tiró una curva a la cabeza de Correa que ya había conectado jonrón, se quitó el caso y se quedó mirando a Kelly antes de continuar su turno, donde fue ponchado y el pitcher le mostró la lengua y gesticuló, Correa reaccionó y comenzó a avanzar hacía el montículo y se inició la discusión, las bancas se vaciaron y se dio el primer altercado, que por fortuna no llegó a mayores, pero Astros sufrirá éste tipo de acciones durante la temporada recortada a 60 juegos por el coronavirus.
Hubo discusiones, los peloteros se olvidaron de la sana distancia, pero al final, por ahora, no pasó a mayores, pero los diferentes equipos se la “cobrarán” a los Astros de Houston, no me cabe la menor duda, debido a que el supuesto robo de señales que se quedó sin sanción, no se olvida.