La Perla, Ver.- La pandemia del Covid-19 no sólo está generando pérdidas económicas, también medioambientales, debido a que la tala inmoderada se ha incrementado 43% durante la contingencia de salud, en comparación con los números del año pasado.
«Hemos empezado el 2020 y comparando de enero, febrero, marzo y abril, estos primeros meses comparados con lo del 2019, subió casi un 43% la tala ilegítima dentro del Parque Nacional Pico de Orizaba», dijo Ricardo Rodríguez Demeneghi, Coordinador del Proyecto Salvemos al Pico de Orizaba.
Una de las razones por las cuales se ha intensificado la tala en una «zona protegida», es porque ante la contingencia las personas que se encargaban de vigilar el volcán más alto de México, se han retirado a sus hogares, lo cual abrió la puerta a muchos talamontes, concretamente en la zona de La Perla, Calcahualco y Alpatláhuac.
«Esta cuarentena ha sido aprovechada por los talamontes, de una forma indiscriminada, sin que las autoridades competentes se pongan las pilas, sin que el Parque Nacional por una sola vez tenga una acción para defenderlo. Ahorita se documentó una tala por La Perla, porque la madera llega rápidamente al destino urbano que es Orizaba, pero también la misma tala se lleva a cabo en Calcahualco, Alpatláhuac, y baja a Coscomatepec y por el lado de Puebla», declaró.
El entrevistado mencionó que la tala inmoderada se ha sumado a una fuerte temporada de incendios forestales, dónde se han consumido cientos de hectáreas de bosques en la zona centro, lo que repercutirá en la escasez de agua para la región.
