Manuela V. Carmona
Orizaba, Ver. – El próximo mes de marzo, vencerá el plazo para que los dueños de 20 empresas e industrias que fueron supervisadas por la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema) resarzan las irregularidades en el tema del tratamiento de agua, emisión de humos entre otras observaciones detectadas, de lo contrario, serán sancionadas económicamente y posiblemente clausuradas.
En entrevista, la titular de la Sedema, Rocío Pérez Pérez manifestó que ya no habrá impunidad para nadie y deberán someterse a lo que indica la Ley Ambiental, pues esas empresas que se supervisaron en marzo, tienen un plazo de un año y se vencerá en tres meses y si no cumplieron tendrán que ser sometidas a lo que la normatividad les aplique.
“Yo considero importante el mensaje que estamos mandando, que es que ya no hay impunidad, ya no hay simulación y de verdad créeme en este año a pesar del COVID, la Sedema siguió trabajando y nos han llegado un sinnúmero de empresas que se quieren poner al corriente”.
Precisó que esas industrias que se “Con nosotros deben de tener sus bitácoras, sus licencias ambientales, sus planes de manejo y el tema de tratamiento de aguas, bueno es un tema federal; entonces por eso acudimos todos para que al rato no fueran con alguna dependencia y se quieran arreglar. Aquí se requiere que se apliquen, porque ya ahorita los tres órdenes de gobierno estamos trabajando muy de la mano”.
Asimismo, mencionó que en los cuerpos de agua han detectado “palizada” de muchas especies, por lo que el caso fue turnado a la Procuraduría de Medio Ambiente y ese problema revela que algo está sucediendo, pues no sólo es basura lo que se arroja a los afluentes, sino que también los árboles que son talados impunemente.
“Hicimos un recorrido de todos los tiraderos que estaban cerca del río Blanco y ahora se combinó a la palizada, ese tema lo está investigando la Procuraduría de Medio Ambiente…cada día estamos viviendo situaciones de inconsciencia porque los árboles seguramente alguien los está talando y eso viene desde arriba porque la corriente los arrastró”.
La funcionaria estatal reconoció que el problema ambiental es bastante complicado y “estamos conminando a los ayuntamientos para qué pongan orden en esta situación, estamos atendiendo la denuncia ciudadana del río Atoyac, pues estamos enfrentando un tema complicado y más en temas de los cuerpos de agua, de verdad tenemos una situación bastante compleja en el estado”.
Dijo que hay una grave contaminación a los cuerpos de agua, plantas de tratamiento que no están regularizadas y es un trabajo enorme el que tiene la Sedema.
“Lamentablemente hay varias situaciones, son varios problemas multifactoriales de lo que sucede, nosotros estamos revisando también junto con el Gobierno federal e hicimos una agenda 2020 para poder visitar las empresas, pero llegó el COVID-19 pero se visitaron 20 industrias asentadas en el corredor y empezamos a conminar y pues tienen un año para empezar a tratar sus aguas, para ponerse al corriente con la Sedema y las autoridades federales, empezamos en marzo del año pasado y se vence en marzo que viene y ya no pudimos continuar, pero las que visitaron tienen que cumplir”.
